QuantiFERON-TB Gold test

Resumen del tratamiento

La prueba QuantiFERON-TB Gold (QFT-G) es un método de diagnóstico serológico utilizado específicamente para detectar infecciones por Mycobacterium tuberculosis. A diferencia de las pruebas cutáneas tradicionales (como la prueba de PPD), esta prueba analiza la respuesta inmunitaria en la sangre para distinguir con precisión entre la infección latente por tuberculosis (LTBI) y la tuberculosis activa. Su principal objetivo es reemplazar las pruebas cutáneas invasivas y proporcionar datos cuantitativos más objetivos que ayuden a los médicos a planificar el tratamiento.

Las ventajas de esta prueba incluyen evitar los factores de interferencia de las pruebas cutáneas, como la vacunación con BCG o infecciones por micobacterias no tuberculosas que pueden causar resultados falsos positivos. Es adecuada para pacientes inmunodeprimidos, grupos que no pueden acudir a revisiones periódicas para observar reacciones cutáneas, y en escenarios clínicos que requieren diagnósticos de alta precisión.

Tipos de tratamiento y mecanismos

QFT-G pertenece a la categoría de pruebas de liberación de interferón gamma (IGRA), cuyo principio central consiste en medir la concentración de interferón gamma secretada por las células T tras la exposición a antígenos específicos de la tuberculosis (ESAT-6, CFP-10 y TB7.7). Cuando la muestra de sangre entra en contacto con estos tres antígenos, las células T de memoria activadas en caso de infección por tuberculosis liberan citoquinas específicas, permitiendo determinar el estado de infección.

Esta técnica supera a las pruebas tradicionales al cuantificar directamente la respuesta inmunitaria, evitando errores subjetivos en la interpretación de la prueba cutánea. El proceso requiere extraer 5 cc de sangre total, distribuirla en tubos de reactivos especiales para cultivo y análisis, todo en un laboratorio, con resultados generalmente en 24 horas.

Indicaciones

Principalmente se utiliza para el cribado de infección latente por tuberculosis, especialmente en trabajadores de la salud, personas con VIH, contactos de casos confirmados, entre otros grupos de alto riesgo. También se emplea para monitorear cambios en la infección en pacientes inmunosuprimidos (como trasplantes de órganos o quimioterapia contra el cáncer).

Se aplica en casos sospechosos de tuberculosis pulmonar activa con resultados de prueba cutánea poco claros, o para descartar interferencias por vacunación con BCG. Además, el cribado en residentes de instituciones de cuidado a largo plazo es una aplicación común.

Modo de uso y dosis

El procedimiento no requiere preparaciones especiales; el paciente solo necesita una venopunción de aproximadamente 5-10 cc. La sangre extraída debe distribuirse inmediatamente en tubos con anticoagulantes y mantenerse a temperaturas por debajo de 4°C para preservar la viabilidad celular. La muestra debe enviarse al laboratorio dentro de las 24 horas posteriores a la extracción.

Los resultados se interpretan en función de la cantidad relativa de interferón gamma secretado, generalmente clasificados como positivo, negativo o indeterminado. El umbral de positividad varía según el fabricante, pero generalmente se considera positivo si supera los 0.35 IU/mL. El informe suele incluir los valores de respuesta a cada antígeno y datos de control.

Beneficios y ventajas

  • Evita el riesgo de infección en el sitio de la inyección cutánea
  • No se ve afectada por antecedentes de vacunación con BCG
  • Los resultados no dependen del estado de suministro de la tuberculina
  • Permite realizar pruebas repetidas para monitorear la eficacia del tratamiento

En comparación con los métodos tradicionales, la sensibilidad de QFT-G alcanza entre 80-90%, con una especificidad superior al 95%, reduciendo significativamente los falsos positivos. Los resultados no se ven afectados por factores fisiológicos como picazón o lesiones cutáneas, siendo útil en cribados antes de cirugías.

Riesgos y efectos secundarios

Este es un procedimiento no invasivo con muy pocos efectos adversos directos, aunque puede causar hematomas o dolor temporal en el sitio de punción. Riesgos específicos incluyen:

  • Falsos negativos en inmunodeprimidos
  • Supresión de la respuesta de células T en infecciones agudas severas
  • Resultados alterados por manejo inadecuado de la muestra sanguínea

Precauciones y contraindicaciones

Las contraindicaciones incluyen: 1. Pacientes con insuficiencia cardíaca o hepática severa que puedan afectar la respuesta inmunitaria 2. Uso de inmunomoduladores (como corticosteroides en dosis altas) en el mismo día

Antes de la prueba, se debe informar al médico sobre antecedentes de contacto reciente, estado inmunológico y medicamentos en uso. En casos sospechosos de VIH, se recomienda realizar también medición de carga viral, ya que la inmunosupresión puede causar falsos negativos.

Interacciones con otros tratamientos

El uso de inmunosupresores (como quimioterapia, biológicos) puede inhibir la respuesta de las células T y afectar la precisión del resultado. Se recomienda suspender estos medicamentos al menos 14 días antes de la prueba. Aunque no hay interacción directa con medicamentos antituberculosos, los pacientes en tratamiento deben someterse a evaluación clínica integral mediante radiografía de tórax y cultivo de esputo. La terapia con interferones (como en hepatitis C) puede interferir en los resultados y debe ser especificado.

Eficacia y evidencia clínica

Estudios clínicos en varios países muestran que QFT-G tiene una sensibilidad del 85-95% en el diagnóstico de tuberculosis activa y una especificidad del 98% en la detección de infección latente. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda priorizar el uso de IGRA en áreas con recursos adecuados en lugar de la prueba cutánea.

Una revisión sistemática en 2018 reportó que la concordancia diagnóstica de QFT-G en personas inmunocompetentes alcanza el 90%, ayudando a reducir tratamientos innecesarios. En brotes en instituciones, esta prueba permite detectar rápidamente a los contactos de alto riesgo.

Alternativas

La prueba tradicional de tuberculina (TST) sigue siendo una opción económica, aunque puede verse afectada por la vacunación con BCG. Otras alternativas incluyen:

  • Radiografía de tórax (para evaluar lesiones activas)
  • Coloración y cultivo de esputo para detección de bacilos ácido-alcohol resistentes
  • Pruebas moleculares (como GeneXpert MTB/RIF)

La elección de la alternativa dependerá del estado inmunológico del paciente y de la presentación clínica. En inmunodeprimidos, se recomienda preferentemente QFT-G para evitar falsos negativos en la prueba cutánea.

 

Preguntas frecuentes

¿Es necesario prepararse de manera especial antes de realizar la test de QuantiFERON-TB Gold? Por ejemplo, ¿debe estar en ayunas o suspender medicamentos?

Generalmente, no se requiere preparación especial antes de realizar la prueba QuantiFERON-TB Gold, como ayuno o suspensión de medicamentos. Sin embargo, si está usando inmunosupresores o corticosteroides que puedan afectar la respuesta inmunitaria, debe informar al personal médico con anticipación, ya que estos medicamentos pueden interferir en la precisión del resultado.

¿Qué debo hacer si el resultado de QuantiFERON-TB Gold es positivo?

Un resultado positivo indica posible infección por tuberculosis, pero se debe correlacionar con síntomas clínicos y estudios de imagen (como radiografía de tórax) para determinar si es infección latente o tuberculosis activa. El médico puede recomendar tratamiento preventivo o seguimiento, según la condición de salud del paciente.

¿Cuál es la diferencia entre QuantiFERON-TB Gold y la prueba cutánea de tuberculina (TST)?

QuantiFERON-TB Gold es una prueba de sangre que evita los falsos negativos asociados a la prueba cutánea (como en vacunados con BCG), y cuyos resultados no están limitados por el tiempo. La prueba cutánea requiere observar la reacción en 48-72 horas, pero puede verse afectada por la vacunación o diferencias individuales. La elección entre ambas depende de las necesidades clínicas.

¿Cuándo es necesario repetir la prueba de QuantiFERON-TB Gold?

Si el resultado inicial es negativo pero hay sospecha clínica de infección (por ejemplo, contacto con un caso confirmado que desarrolla síntomas), o en inmunodeprimidos (como VIH), el médico puede recomendar repetir la prueba en 4-8 semanas. También puede ser necesario en seguimiento tras tratamiento inmunomodulador para confirmar estado de infección.

¿Qué factores pueden afectar la precisión de la prueba QuantiFERON-TB Gold?

La precisión puede verse afectada por vacunación reciente (como BCG), inmunosupresión severa o infección por VIH, que pueden causar falsos negativos. Además, una manipulación inadecuada de la muestra sanguínea, como reacción insuficiente con el anticoagulante, también puede influir en los resultados. Es fundamental que el laboratorio siga estrictamente los protocolos para garantizar la exactitud.