Inactivated influenza vaccine

Resumen del tratamiento

La vacuna contra la influenza inactivada es una vacuna utilizada para prevenir la infección por el virus de la influenza, que mediante procesamiento físico o químico, pierde su capacidad patógena pero mantiene su antigenicidad.

El principal objetivo de esta vacuna es estimular el sistema inmunológico del cuerpo para producir anticuerpos específicos, de modo que en futuras exposiciones al virus activo de la influenza, pueda identificarlo y neutralizarlo eficazmente.

La vacuna inactivada contra la influenza se aplica ampliamente durante la temporada de influenza, especialmente en grupos de alto riesgo como ancianos, niños pequeños, mujeres embarazadas y pacientes con enfermedades crónicas.

Tipos de tratamiento y mecanismos

La vacuna inactivada contra la influenza pertenece a la inmunidad pasiva, y como su nombre indica, utiliza virus muertos para provocar una respuesta inmunitaria.

El mecanismo de acción de la vacuna incluye dos aspectos principales: primero, los antígenos inyectados son reconocidos y procesados por el sistema inmunológico, lo que provoca la activación de las células B y T; en segundo lugar, estas células inmunitarias activadas se diferencian en células de memoria, proporcionando una respuesta rápida ante posibles invasiones virales futuras.

Esta característica de inmunidad pasiva permite que la vacuna inactivada ofrezca protección en un corto período, aunque su duración puede ser algo menor en comparación con las vacunas de virus vivos atenuados.

Indicaciones

La vacuna inactivada contra la influenza se usa principalmente para prevenir la infección por los virus de la influenza estacional, incluyendo los tipos A y B.

Es adecuada para todas las personas mayores de 6 meses, especialmente aquellas con mayor riesgo de complicaciones por influenza, como personas mayores de 65 años, niños pequeños, mujeres embarazadas, pacientes con enfermedades respiratorias crónicas, enfermedades cardiovasculares y personas con inmunodeficiencia.

Además, para personas que requieren hospitalización prolongada o viven en entornos colectivos, el uso de la vacuna inactivada también es una medida preventiva efectiva.

Modo de administración y dosis

La vacuna inactivada contra la influenza generalmente se administra mediante inyección intramuscular o subcutánea, siendo la inyección intramuscular la forma más común, especialmente en el músculo del brazo.

La dosis estándar es de 0.5 ml, que contiene 15 microgramos de antígeno por cepa viral. Para la mayoría de adultos y niños, una sola inyección proporciona protección durante toda una temporada de influenza.

Sin embargo, en niños de 6 meses a 8 años, en la primera vacunación puede ser necesario administrar dos dosis con un intervalo de al menos 4 semanas para asegurar una respuesta inmunitaria suficiente.

Beneficios y ventajas

Las principales ventajas de la vacuna inactivada contra la influenza incluyen su amplio rango de aplicación y su buena seguridad.

  • Proporciona una prevención efectiva de la influenza, reduciendo el riesgo de infección y la gravedad de la enfermedad
  • Puede usarse en todas las edades, incluyendo mujeres embarazadas y personas con inmunodeficiencia
  • No causa síntomas de influenza reales, ya que el virus está inactivado
  • Permite ajustar las cepas virales según la temporada de influenza para mantener la eficacia de la vacuna

Además, el proceso de producción de la vacuna inactivada es maduro y estable, capaz de satisfacer las demandas de salud pública a gran escala.

Riesgos y efectos secundarios

Al igual que la mayoría de las vacunas, la vacuna inactivada contra la influenza puede causar algunos efectos secundarios leves, que generalmente son temporales y no requieren tratamiento especial.

  • En el sitio de inyección puede aparecer enrojecimiento, hinchazón o endurecimiento
  • Fiebre leve, fatiga o dolor de cabeza
  • En algunos casos, reacciones alérgicas como erupción cutánea o dificultad para respirar

Es importante tener en cuenta que las reacciones alérgicas graves son raras, pero si ocurren, se debe buscar atención médica de inmediato.

Precauciones y contraindicaciones

Al administrar la vacuna inactivada contra la influenza, el médico evaluará el estado de salud del paciente para garantizar la seguridad de la vacunación.

  • Contraindicaciones incluyen alergia a componentes de la vacuna, como proteína de huevo u otros ingredientes
  • Personas que hayan tenido reacciones alérgicas graves a esta u otras vacunas
  • En casos de enfermedades agudas con fiebre alta, se debe posponer la vacunación

Además, las mujeres embarazadas deben consultar con su médico antes de vacunarse para evaluar riesgos y beneficios personales.

Interacciones con otros tratamientos

La vacuna inactivada contra la influenza tiene pocas interacciones con otros medicamentos o tratamientos, pero se deben tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • Vacunación simultánea con otras vacunas: generalmente es segura, pero se recomienda un intervalo de al menos 24 horas
  • Inmunosupresores: pueden reducir la eficacia de la vacuna
  • Biológicos como inhibidores del factor de necrosis tumoral: pueden afectar la respuesta inmunitaria

Por lo tanto, antes de la vacunación, se debe informar al médico sobre todos los medicamentos y tratamientos en uso.

Eficacia y evidencia

Numerosos ensayos clínicos y estudios epidemiológicos confirman que la vacuna inactivada contra la influenza puede reducir eficazmente el riesgo de infección por el virus de la influenza.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la eficacia de la vacuna puede alcanzar entre el 40% y el 60% durante la temporada de influenza, con una protección más significativa contra complicaciones graves y hospitalizaciones.

Además, datos de vacunaciones masivas a largo plazo muestran que la vacuna tiene un efecto notable en la prevención de complicaciones y muertes relacionadas con la influenza.

Alternativas

Para quienes no puedan recibir la vacuna inactivada contra la influenza, se pueden considerar las siguientes alternativas:

  • Vacuna de influenza de virus vivos atenuados: adecuada para ciertos grupos de edad, pero no para embarazadas ni inmunodeficientes
  • Medicamentos antivirales para prevención: como oseltamivir y zanamivir, útiles en grupos de alto riesgo o como complemento después de la vacunación
  • Medidas no farmacológicas de prevención: como usar mascarillas, lavarse las manos con frecuencia y mantener la distancia social

La elección de estas alternativas debe basarse en la condición de salud individual y en la recomendación del médico.

 

Preguntas frecuentes

¿Cómo debo prepararme para recibir la vacuna inactivada contra la influenza?

Antes de recibir la vacuna, se recomienda asegurarse de que el estado de salud sea estable. Si hay fiebre o síntomas de infección grave, se debe posponer la vacunación. Además, informar al médico si se tiene alergia a componentes de la vacuna o antecedentes de reacciones alérgicas graves. Las mujeres embarazadas o en período de lactancia también deben consultar previamente con su médico para garantizar la seguridad de la vacunación.

¿Cuáles son los posibles efectos secundarios de la vacuna inactivada contra la influenza?

La mayoría de las personas experimentan efectos secundarios leves, como enrojecimiento, dolor o hinchazón en el sitio de inyección, que suelen desaparecer en unos días. Algunas pueden sentir fatiga, dolor de cabeza o fiebre leve, pero estas reacciones son generalmente temporales. En caso de reacciones alérgicas graves, como dificultad para respirar o hinchazón facial, se debe acudir a un centro médico de inmediato.

¿Qué hábitos de vida debo seguir después de la vacunación?

Se recomienda mantener hábitos saludables, como dormir lo suficiente, llevar una alimentación equilibrada y hacer ejercicio moderado para fortalecer el sistema inmunológico. También, evitar el agotamiento excesivo y alimentos irritantes para no afectar la eficacia de la vacuna. Además, durante las 24 horas posteriores a la vacunación, se debe evitar el contacto con objetos congelados para reducir molestias en el sitio de inyección.

¿Qué tan efectiva es la vacuna contra la influenza inactivada?

La protección que ofrece la vacuna generalmente comienza a los 2 semanas después de la vacunación y puede durar varios meses. Los estudios muestran que la vacuna reduce efectivamente la incidencia y gravedad de la influenza, con una protección particularmente significativa en grupos de alto riesgo como ancianos y niños. Sin embargo, debido a la variabilidad del virus de la influenza, la efectividad puede variar cada año, por lo que la vacunación anual es clave para mantener la mejor protección.

¿Las mujeres embarazadas o en período de lactancia pueden vacunarse contra la influenza inactivada?

Sí, las mujeres embarazadas y lactantes pueden vacunarse con la vacuna inactivada contra la influenza. De hecho, los médicos suelen recomendar la vacunación durante el embarazo para proteger la salud de la madre y del bebé. Sin embargo, se recomienda consultar con un médico antes de vacunarse para evaluar riesgos y beneficios personales.