Routine pediatric immunizations

Resumen del tratamiento

La vacunación infantil rutinaria es una medida preventiva sistemática que induce una respuesta inmunitaria activa en el cuerpo mediante la administración de vacunas, con el fin de prevenir la infección por diversas enfermedades altamente contagiosas. Este programa está diseñado específicamente para las características del sistema inmunológico en las etapas de crecimiento y desarrollo infantil, siguiendo los calendarios de vacunación recomendados por la Organización Mundial de la Salud y las autoridades sanitarias nacionales, lo que ayuda a reducir significativamente la gravedad, las complicaciones y la mortalidad.

La vacunación no solo protege a los niños individualmente, sino que también mediante la "inmunidad de grupo" reduce la transmisión de enfermedades en la comunidad. Este programa es aplicable a niños desde recién nacidos hasta los 18 años que no hayan sido vacunados o no hayan completado su esquema de vacunación, siguiendo las etapas establecidas en el manual de vacunación publicado por la autoridad sanitaria.

Tipos y mecanismos de las vacunas

Las vacunas se dividen principalmente en vacunas inactivadas, vacunas atenuadas y vacunas subunitarias. Las vacunas inactivadas contienen patógenos que han perdido su capacidad de infectar, como la vacuna contra la tos ferina; las vacunas atenuadas utilizan patógenos debilitados, como la vacuna contra el sarampión. Estos antígenos estimulan las células T y B para producir una respuesta inmunitaria de memoria, que permite una rápida activación de anticuerpos protectores al contacto con el patógeno real.

Las tecnologías modernas de vacunas también han desarrollado nuevos tipos, como las vacunas de partículas similares a virus y las vacunas de ARNm, que pueden inducir respuestas específicas a determinados antígenos. Normalmente, se requiere de 2 a 4 semanas después de la vacunación para que se genere inmunidad suficiente, y algunas vacunas necesitan dosis de refuerzo para prolongar la protección.

Indicaciones

Este esquema proporciona protección inmunitaria contra 12 enfermedades infecciosas altamente mortales, incluyendo:

  • Tos ferina, tétanos, difteria
  • Rotavirus, Haemophilus influenzae tipo b
  • Sarampión, paperas, rubéola
  • Hepatitis B, varicela, meningitis meningocócica

Incluye la vacunación con BCG en las primeras 24 horas de vida y otros programas de vacunación escalonados según la edad, que ayudan a bloquear la transmisión vertical y las cadenas de transmisión comunitaria.

Modo de administración y dosis

La administración se realiza principalmente mediante inyección intramuscular o subcutánea, aunque algunas vacunas como la vacuna oral contra el rotavirus se administran por vía digestiva. La dosis se ajusta según la edad, peso y tipo de vacuna, por ejemplo:

  • Una dosis de BCG al nacer
  • La vacuna DTP requiere completar 3 dosis básicas + refuerzo
  • La vacuna contra el VPH requiere 2 a 3 dosis

El calendario de vacunación debe seguir estrictamente el "Manual de inmunización"; algunas vacunas deben administrarse con intervalos de 1 a 2 meses para asegurar la producción adecuada de anticuerpos.

Beneficios y ventajas

La vacunación puede generar los siguientes beneficios clave: 1. Reducir la tasa de infección en un 80-95%, 2. Prevenir inmunodeficiencias adquiridas, 3. Evitar el uso excesivo de recursos médicos. Por ejemplo, cuando la tasa de vacunación contra el sarampión alcanza el 95%, se logra la inmunidad de grupo, bloqueando la transmisión comunitaria.

Este método tiene ventajas en costo-efectividad; según estadísticas de la OMS, cada dólar gastado en vacunas puede ahorrar entre 10 y 16 dólares en gastos médicos. Los sistemas digitales de registro de vacunación también garantizan la integridad del esquema de inmunización.

Riesgos y efectos secundarios

Las reacciones locales comunes incluyen enrojecimiento e hinchazón en el sitio de inyección, y fiebre baja (menos de 38°C), que generalmente desaparecen en 2-3 días. Las reacciones alérgicas graves (como shock anafiláctico) son raras, con una incidencia inferior a una en un millón, y suelen ocurrir dentro de los 30 minutos posteriores a la vacunación.

Las complicaciones extremadamente raras pero que requieren atención incluyen:

  • Úlceras en el sitio de la vacuna BCG
  • Convulsiones febriles tras la vacuna contra el sarampión
  • Síndrome de Guillain-Barré asociado a toxoide tetánico

Precauciones y contraindicaciones

Antes de la vacunación, se debe informar al personal sanitario sobre: 1. Antecedentes de alergias graves, 2. Historial de inmunodeficiencia, 3. Fiebre o enfermedad aguda en curso. Las contraindicaciones incluyen:

  • Alergia a componentes de la vacuna (como el cobalto o potasio)
  • Inmunodeficiencia congénita
  • Reciente administración de productos sanguíneos

Grupos especiales como prematuros o pacientes con cardiopatías congénitas deben seguir la evaluación individual del médico.

Interacciones con otros tratamientos

Las vacunas no tienen interacciones farmacológicas directas con antibióticos o antipiréticos, pero los inmunosupresores (como los corticosteroides) pueden reducir la respuesta inmunitaria. Se recomienda:

  • Intervalo de 2 semanas entre la vacuna oral contra la poliomielitis y los probióticos
  • Retrasar la vacunación en pacientes en quimioterapia
  • Evitar administrar otras vacunas dentro de las 48 horas posteriores a la vacunación

Administrar varias vacunas simultáneamente no aumenta el riesgo de efectos secundarios graves, pero se deben respetar los intervalos de vacunación.

Eficacia y evidencia

Datos globales muestran que la vacuna contra la tos ferina tiene una eficacia del 90%, y la vacuna contra la poliomielitis ha reducido los casos mundiales en un 99%. Desde que Taiwán incluyó la vacuna contra Haemophilus influenzae tipo b en el programa público en 1998, los casos de meningitis relacionados disminuyeron en un 95%.

La evaluación de la eficacia de las vacunas se basa en la "tasa de seroconversión" y la "cobertura de la población"; según la OMS, los programas de vacunación han reducido en un 40% la mortalidad infantil en menores de 5 años. Sin embargo, la protección también depende de la coincidencia genética entre las cepas de la vacuna y las virus en circulación.

Alternativas

Para quienes tienen alergia severa a los componentes de la vacuna, se pueden considerar: 1. Inmunoglobulina (proporciona inmunidad pasiva), 2. Retrasar la vacunación hasta que se eliminen los alérgenos. Estas alternativas son solo temporales y no sustituyen la inmunización activa.

En casos especiales como prematuros, la dosis puede ajustarse según el peso, y en inmunodeficiencias congénitas, se deben evaluar alternativas como la vacunación con vacunas inactivadas en lugar de las atenuadas.

 

Preguntas frecuentes

¿Es necesario ajustar la alimentación o el sueño antes de la vacunación?

No es necesario ayunar ni modificar el sueño, pero se recomienda que los niños mantengan su rutina habitual, evitando vacunarse cuando estén cansados o enfermos. Si tienen fiebre o una enfermedad aguda, se debe posponer la vacunación hasta la recuperación para garantizar la efectividad y reducir molestias.

¿Qué hacer si aparece enrojecimiento o fiebre en el sitio de la inyección?

Para enrojecimiento o hinchazón leves, se puede aplicar compresas frías o un paño limpio y frío en el área. Para fiebre, usar antipiréticos recomendados por el médico según el peso, y descansar mucho y mantenerse hidratado. Si la fiebre dura más de 48 horas o la hinchazón aumenta, se debe consultar al médico de inmediato.

¿Qué pasa si se pierde la fecha de vacunación programada?

No es necesario comenzar de nuevo, solo seguir el esquema según la edad y el historial de vacunación, agregando las dosis pendientes según la guía del centro de salud. Se recomienda contactar al centro médico para ajustar el calendario, pero un retraso no afecta la protección inmunitaria ya adquirida.

¿Vacunar varias vacunas al mismo tiempo afecta la seguridad o la eficacia?

Los programas de vacunación consideran la seguridad de administrar varias vacunas simultáneamente, sin reducir la eficacia inmunitaria. La OMS recomienda seguir el calendario para prevenir enfermedades, pero si los padres tienen dudas, pueden consultar con el médico para ajustar la planificación.

¿Cuánto dura la protección después de completar la vacunación básica? ¿Es necesario refuerzo?

La duración de la protección varía según la vacuna. Por ejemplo, la vacuna contra Haemophilus influenzae tipo b (Hib) dura aproximadamente 5 años, mientras que la de tétanos requiere refuerzo cada 10 años. El médico informará a los pacientes elegibles sobre la necesidad de dosis de refuerzo para mantener la inmunidad prolongada.